Se despertó, cansada como siempre, aunque hubiera estado durmiendo 17 horas, con aquella canción que tenía como despertador que tanto le recordaba a él... Pulsó uno de los botones, sin pensar siquiera cual apretaba, y a los cinco minutos otra vez, aquella canción que tanto expresaba lo que sentía...
Frustrada por volverse a despertar un día más pensando en él, apagó (ahora sí) el despertador y de un salto se levantó. Apretó fuerte los ojos a la vez que se ponía de puntillas y estiraba sus brazos todavía dormidos...
Dio dos pequeños pasos situándose frente aquel espejo que siempre la mostraba todo lo que no quería... Se miró pero no vió nada, se buscó pero no encontró nada... "Tal vez haya desaparecido" pensó sin darle más importancia. Dio unos pasos más, saliendo de aquella alfombra cálida y encontrándose con el gélido suelo... Cogió sin pensar sus viejas zapatillas y se dirigió al baño. Allí estaba, otra vez un espejo, que ahora si mostraba la triste mueca que reflejaba su rostro. Quiso no verse, quiso que el pensamiento que antes, sin ninguna intención había pasado por su cabeza fuera realidad, desaparecer... Nadie se daría cuenta pensó.
Se dirigió hacia la cocina, y desayunó un poco de leche sin apenas tener ganas de hacerlo, solo era la rutina... Cuando acabó, lavó el vaso notando de nuevo esa sensación de frío, agua gélida, gélido suelo... todo era frío desde que él se había ido...
miércoles, 26 de marzo de 2008
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